El déficit fiscal llega a Bs 20.000 MM, Ortiz dice que la caída de ingresos fue ‘grande’
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El déficit fiscal o falta de recursos llegó en el primer semestre de este año a Bs 20.000 millones, monto que estaba proyectado alcanzar hasta el final de este año. El ministro de Economía, Óscar Ortiz, explicó que la situación es resultado de la caída de los ingresos por la cuarentena dispuesta para hacer frente a la pandemia.
“Hemos hecho todos los esfuerzos, pero la caída de ingresos es mucho más grande que la caída de los egresos”, explicó a la conclusión de un informe ante los miembros de la Comisión de Planificación sobre el financiamiento y administración de los recursos económicos manejados en la emergencia sanitaria.
Hasta fines de año se proyectaba un déficit, falta de recursos o la diferencia entre los ingresos y egresos, de Bs 20 mil millones, pero esa cifra se alcanzó en los primeros seis meses de esta gestión a consecuencia de la falta de ingresos.
En marzo se declaró la cuarentena que implicó la suspensión de gran parte de las actividades económicas y de servicios en Bolivia. Desde principios de mes se está en una franca flexibilización de las medidas de restricción para retomar las actividades en procura de la reactivación económica.
El Gobierno accedió a un crédito de 7.000 millones de bolivianos del Banco Central de Bolivia, con lo que se financió parte del déficit. Ortiz recordó que el Ejecutivo no pudo acceder a créditos internacionales, porque el MAS en el Legislativo no los aprobó, entre ellos del Fondo Monetario Internacional (FMI).
“Estamos utilizando mucho recurso interno”, explicó.
La presidenta de la Asamblea Legislativa y del Senado, Eva Copa, denunció que el gobierno transitorio de Jeanine Áñez ya pagó un interés de $us 1,6 millones por el crédito no aprobado en el Legislativo del Fondo Monetario Internacional (FMI), de $us 327 millones.
Para paliar los efectos de la pandemia, el gobierno pagó los bonos Familia, Canasta Familiar y Universal. Anunció el pago de otro bono, el Bono Salud de Bs 500, para lo que espera la aprobación de créditos externos.
Fuente: la Razón
